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Brenda Flores, oportunidad para lucir en Río 2016
Brenda Flores era una joven que ni siquiera se dedicaba al atletismo cuando vio a Ana Gabriela Guevara ser campeona en el Mundial de Atletismo de París 2003. Esa imagen en el estadio de Saint Denis, protagonizada por la mejor corredora en la historia de México, la inspiró para buscar triunfos que tomaron rumbo a los 17 años, cuando comenzó su trayectoria en las pruebas de fondo que ahora la tienen a unas semanas de su debut en Juegos Olímpicos.
“Verla (a Ana Guevara) es muy imponente; te sorprendes de ver una mexicana con esa altura, esa musculatura, en una prueba de velocidad a las que no estamos acostumbrados”, dice Flores a Excélsior. “Para mí fue muy impactante, muy motivante conocer su historia. Saber con qué determinación lo hacía. A mí me llenaba mucho de esas ganas de querer ser como ella”, dice Flores, quien a los 24 años aspira a ser una de las 10 mejores en Río 2016. “Ella es una de mis grandes referentes, para mí fue alguien motivador, alentador y sí soñé con verme en el podio como ella”.
Nacida en el Estado de México, Brenda Flores ha conseguido este ciclo medallas de oro en Juegos Centroamericanos y del Caribe 2014 y en los Juegos Panamericanos de 2015. Tiene paciencia, lectura de carrera y madurez, pero también está consciente de que Río 2016 serán sus primeros Juegos Olímpicos.
“Lograr la medalla de oro en los 10,000 metros y también el título y el récord de los Panamericanos en los 5,000 metros fue algo genial, me sorprendió. Ir al Mundial de Beijing (2015) fue una gran experiencia, aunque no quedé en el primer sitio. Ahora estoy al 100 por ciento para los Olímpicos, súper decidida a dar lo mejor, es mi objetivo del año y, posteriormente, seguir de muy buena forma para estar, al menos, en otros dos ciclos olímpicos”.
En el Campeonato Mundial del año pasado terminó en el sitio 14. Ésa es su mejor referencia respecto al duelo con las mejores exponentes que estarán en Río de Janeiro. En China tuvo una marca de 32:15.26 minutos, en la pista del estadio Nido de Pájaro, pero ahora su mejor registro es 31:45.16, que hizo en Estados Unidos.
“Hace unos tres años decía que había iniciado muy grande a correr, a hacer el atletismo, pero ahora digo que no, ¡que fue en el momento justo e indicado. Estoy muy feliz que así haya sido y, ahora, estoy muy comprometida con esto”, afirma.
El reto que se trazó junto a su entrenador Luis Nemer será llegar en las mejores condiciones para aspirar a colocarse entre las 10 mejores de la competencia olímpica, donde sabe que no puede haber errores.
“Volveré satisfecha si sé que tuve el mejor nivel deportiva y regreso con la mejor actuación de mi vida en una competencia a nivel mundial. Estar entre las mejores 10 sería un gran logro, si hay oportunidad de quedar en un mejor lugar, seré muy feliz”, asegura.
Río 2016 será el primer reto olímpico de Brenda, pero sólo un escalón para una consolidación internacional que, de forma natural, debe darse con la madurez competitiva que brindan los años.
Para aspirar a una prueba exitosa debe conocer las condiciones que afrontará en la ciudad olímpica. “He investigado; sé que el factor humedad va a ser muy duro y será el principal factor a vencer”.
“Nunca he ido a Río de Janeiro, pero me he informado en cuanto a condiciones climáticas y creo que ahora eso es lo más importante. Conozco a las principales rivales porque estuvieron en el Mundial, y hay que saber manejar las estrategias y la forma en que corren las atletas es la mejor forma de prepararme”.
La fondista tricolor es parte de la delegación de 22 atletas que hasta el momento han confirmado las autoridades nacionales, un número elevado en medio de la incertiudumbre administrativa y las complejidades directivas. Para sortear esos imponderables, la corredora se apoya en la sicología, la licenciatura que estudia a la par de ser deportista.
“Me ayuda bastante estudiar sicología. Algo fundamental en cuanto a mi desarrollo deportivo y mental, me he brindado estrategias que son importantes, como la visualización, tener concreto un objetivo, saber manejar el estrés, tener técnicas que te ayuden previo a las competencias, durante los días de entrenamiento y después del mismo”.
Fuente: Excelsior